En contrapunto al caso de Leipart, que dijo NO a
acabar con un mal mayor de una manera que él no veía como la correcta,
encontramos el caso del GAL en España, dónde la ética pública no apareció en
este asunto. Esta película muestra a modo de ejemplo lo acontecido en España
hace pocos años, en el que se intenta acabar con unos de los mayores males
sufridos por los españoles, pero de una manera poco trasparente, saltándose esa
ética pública.
Sinopsis
Basado en hechos reales de la reciente historia de España,
GAL sigue la investigación periodística llevada a cabo por periodistas
españoles sobre la naturaleza de los GAL, que entre los años 1983 y 1987
cometieron contra el entorno de ETA más de treinta atentados con el resultado
de 27 muertos y más de cincuenta heridos en el sur de Francia, una gran parte
por error. La filosofía de esta guerra contra ETA, que entonces
vivía sus momentos de mayor crueldad y agresividad en sus acciones contra el estado español, eran la máxima del ojo por ojo por una parte, y la creencia de que trasladando la guerra a territorio galo, el gobierno francés empezaría a colaborar en la lucha contra ETA. Y así fue. Como resultado de las investigaciones periodísticas, la justicia española pudo demostrar que los atentados fueron organizados y financiados por parte del Gobierno español, y en 1994 fueron condenados 11 funcionarios públicos, con el Ministro del Interior de la época a la cabeza, a penas de cárcel entre 10 y 4 años por diversos delitos. Pero con anterioridad a las sentencias, la investigación, encabezada por los periodistas de Diario 16, también supuso el cese del director del periódico, al que siguieron sus principales colaboradores, que consiguieron poner en circulación un nuevo diario, El Mundo del siglo XXI, en un tiempo record, y desde cuyas páginas prosiguieron con éxito las investigaciones de un caso que se puede considerar el Watergate español...
vivía sus momentos de mayor crueldad y agresividad en sus acciones contra el estado español, eran la máxima del ojo por ojo por una parte, y la creencia de que trasladando la guerra a territorio galo, el gobierno francés empezaría a colaborar en la lucha contra ETA. Y así fue. Como resultado de las investigaciones periodísticas, la justicia española pudo demostrar que los atentados fueron organizados y financiados por parte del Gobierno español, y en 1994 fueron condenados 11 funcionarios públicos, con el Ministro del Interior de la época a la cabeza, a penas de cárcel entre 10 y 4 años por diversos delitos. Pero con anterioridad a las sentencias, la investigación, encabezada por los periodistas de Diario 16, también supuso el cese del director del periódico, al que siguieron sus principales colaboradores, que consiguieron poner en circulación un nuevo diario, El Mundo del siglo XXI, en un tiempo record, y desde cuyas páginas prosiguieron con éxito las investigaciones de un caso que se puede considerar el Watergate español...
No se trata de ver quién hizo mejor o peor, sino de tratar diversas situaciones acontecidas historicamente, en las que se ha visto la necesidad de combtir un mal mayor.
ResponderEliminarTratamos de que la calidad del sistema democrático, sea aplicada o no.